El Palacio Esterhazy (o Palais Esterházy) es un palacio barroco de Viena propiedad de la familia noble Esterházy. Quizás os suena porque alberga un restaurante muy popular en sus antiguas bodegas, el Esterházykeller. Este es uno de los restaurantes más famosos de la ciudad. En él podréis comer de platos típicos como Schnitzel o el Gulash en unas catacumbas del siglo XVI. El restaurante lleva abierto desde 1808 y prácticamente no ha cambiado nada desde entonces.
Pero lo que ocurre es que la mayoría de la gente no repara en dónde está situado este especial restaurante. El palacio, de construcción barroca y fachada con pilastras jónicas gigantes, no tiene un aspecto especialmente imponente desde la calle. Tiene una barandilla de hierro forjado con la cresta dorada de la familia Esterházy engarzada en ella, pero como Viena está tan llena de detalles, hay que fijarse en la fachada para verla. Lo que no parece desde fuera es que dentro del edificio hay dos patios, una capilla de dos pisos consagrada San Leopoldo (el patrón de Viena) con altares barrocos y un órgano del 1800 donde Joseph Haydn trabajaba y componía.
Por cierto, hay dos palacios en Viena con el mismo nombre. Este Palais Esterházy en particular está en Wallnerstraße (el otro está en Kärntner Straße). También hay uno en Eisenstadt, en la provincia de Burgenland, el cual es precioso y vale la pena visitarlo si queréis hacer un viaje de un día fuera de Viena!
Hoy en día, el edificio es propiedad de la fundación de Karl Wlaschek (el dueño de los supermercados Billa) y las salas del palacio se alquilan a empresas, organizaciones y a particulares.
Este palacio es una gema histórica escondida, ya que desde fuera no se diría que es un palacio, y menos uno donde trabajó Haydn.
Está en Wallnerstrasse 4, en el distrito 1. Si bajáis en la estación de metro Herrengasse (linea U3) está a medio minuto andando. Pasear por esa zona es descubrir un trozo de historia en cada edificio.