Hedy Lamarr, (Viena, Imperio austrohúngaro, 1914 – Orlando, Estados Unidos, 2000), fue una actriz, inventora e ingeniera de telecomunicaciones vienesa. Es conocida como la mujer más hermosa de la historia del cine y también como la inventora de la primera versión del espectro ensanchado, el precursor del wifi. Provocadora y extremadamente inteligente, Lamarr empezó sus estudios de ingeniería a los 16 años, pero tres años más tarde, abandonó la ingeniería atraída por su vena artística, y empezó en el teatro como alumna del director Max Reinhardt. Se hizo rápidamente mundialmente famosa por la secuencia de la película comercial Éxtasis (1937), en la que, por espacio de diez minutos, aparece completamente desnuda, convirtiéndose así en la primera mujer en la historia del cine que apareciera desnuda en una película comercial.
Fritz, su marido, era un proveedor de municiones, de aviones de combate y de sistemas de control de Adolf Hitler y de Benito Mussolini. Era un hombre muy celoso y, tras casarse con Hedy, intentó hacerse con todas las copias existentes de la película en la que su esposa aparecía desnuda. Nunca llegó a conseguirlo, pero los celos le corroían y nunca dejaba a la actriz sola: la obligaba a acompañarle en todas las cenas y viajes de negocios y la encerraba en casa cuando él se iba. La presionó hasta tal punto que dejó su carrera como actriz. Pero Hedy, que era una persona activa y con mucho talento e inteligencia, aprovechó la soledad de su encierro para continuar sus estudios de ingeniería y para, por que no decirlo, mantener una relación sentimental con su asistenta, la cual le permitió obtener la ayuda necesaria para escapar por la ventana del baño de un restaurante, donde le esperaba un automóvil que la condujo hasta París.
De París consiguió viajar a Londres, y allí conoció a Louis B. Mayer, el empresario de la Metro Goldwyn Mayer, con el cual se fue a Hollywood y el que le ofreció un contrato de siete años con la compañía, durante los cuales trabajó para directores tales como King Vidor, Jacques Tourneur o Cecil B. DeMille e hizo una treintena de películas (aunque no son especialmente conocidas).
En 1941 conoció al compositor vanguardista George Antheil, del que se enamoró inmediatamente y junto al cual inventaron la tecnología que resultó ser la solución esencial para la comunicación secreta vía radio y para compartir el número de canales de radio ocupados. Este invento hizo posible la transmisión de señales secretas sin poder ser interferidas y acabó convirtiéndose en la precursora de la tecnología que se utiliza hoy en día en las comunicaciones inalámbricas de los teléfonos móviles, los sistemas GPS y la tecnología wifi. De hecho, su invento ha sido tan relevante para la historia de la humanidad que, el día de su nacimiento, el 9 de noviembre, se celebra el Día del Inventor en su honor.
Así que ya veis, hay personas que han tenido vidas de película y que han aportado mucho a nuestra sociedad pero que no han llegado a ser figuras muy reconocidas. Nunca está de más conocer las trayectorias vitales de gente luchadora que vivió la vida al límite.