Los Kipferl son brioches en forma de media luna muy típicos en Austria y Baviera. Hay de dos tipos: o dulces o salados, y son los antecesores del cruasán.
Se dice que un panadero de Mödling (un pueblo al lado de Viena) creó estos bollos en forma de media luna para celebrar que los austriacos acababan de vencer a los turcos en el asedio a Viena. Así, decidió crear esta masa de levadura y hornearla imitando el símbolo de los turcos, para burlarse de ellos y conmemorar la victoria.
Llegada a Francia y creación del cruasán
En el siglo XIX, cuando María Antonieta, la hija de la Emperatriz María Teresa de Austria, se casó con Luis XVI, llevó los Kipferl a la corte francesa. Los franceses los acogieron con mucho entusiasmo, y los desarrollaron hasta llegar al típico cruasán que conocemos hoy en día.
Así, en Viena podéis encontrar cruasanes, sí, pero son mucho más populares los Kipferl, los cuales pueden ser de vainilla, de chocolate, rellenos de nueces, salados…
Si pasáis por cualquier panadería de Viena, no os olvidéis de comprar uno, porque es un bollo que sólo encontraréis en esta parte de Europa.