Niki Lauda (o Andreas Nikolaus Lauda) fue el piloto austriaco de Fórmula 1 más conocido del país. Nacido en Viena en 1949 en el seno de una família rica, Lauda fue campeón del mundo en 1975, 1977 y 1984 y se le considera uno de los pilotos más concienzudos, capaz de pasarse largas horas refinando el comportamiento del coche. Actualmente es un importante empresario, dueño de la aerolinea Niki.
En 1976 sufrió un grave accidente que le produjo las graves quemaduras en la cabeza y el cuerpo que le dejaron marcas de por vida. A raíz de esto, dejó la fórmula 1 y puso su propia compañía aérea, Lauda Air. Pero las deudas y una larga querella con la compañía Austrian Airlines lo obligaron acerrar y volver a fundar una nueva compañía de aviación en 2003, la que posee actualemnte, Niki.
En 1995 fue asesor técnico de Ferrari. A su llegada le pidieron consejo para ganar nuevamente después de muchos años de sequía y la respuesta inmediata de Lauda fue «Contraten a Michael Schumacher». Y Michael Schumacher vino y se trajo al equipo de ingenieros de Benetton, encabezados por Ross Brawn. El resultado fue que arrasaron de 2000 a 2004.
En 2010 Lauda colabora como comentarista de F1 en la cadena privada alemana RTL.
Niki Lauda es querido y odiado en Austria a partes iguales. Es un personaje controvertido que no deja indiferente a nadie, sobretodo por sus comentarios y sus ideas. Hace poco, habló bastangte despectivamente de los homosexuales y, cuando la prensa se le hechó encima, corrió a justificarse y a «explicar» que se le había entendido mal. Sea como sea, Lauda sigue estando en el candelero en los periódicos y revistas de la sociedad austríaca.
