Y en un día como hoy, 6 de diciembre, llega Nikolaus a repartir regalos a los niños buenos. Hoy es el Papá Noel de los austríacos. La noche del 6 de diciembre (día de San Nicolás, en honor al día en que murió dicho santo en el 326 d.C.), Sankt Nikolaus va de casa en casa repartiendo chocolates, frutos secos y naranjas a los niños que se han portado bien durante el año. Es una tradición tan milenaria como la de Krampus. Se cree que data de mediados del siglo XVII y se basa en un hombre vestido de obispo (como podéis ver en la imagen), con una larga barba blanca y un cetro que premia a los niños por su buen comportamiento. Una leyenda muy parecida a la de Santa Claus, Papá Noel, San Nicolás o como le queráis llamar. En realidad, la misma leyenda, sólo que celebrada el día de San Nicolás y a la manera ancestral, sin regalaran tantos jugetes, sino dulces y frutas.
Es que, en un país tan católico como Austria (Estado católico, no laico, no os olvidéis) no es raro celebrar un santo de una manera tan popular. Estos días, las tiendas y los supermercados están llenos de figuritas de chocolate en forma de San Nicolás, y chocolatinas de todo tipo, a parte de más frutos secos y naranjas de lo normal para que los niños celebren este día tan esperado.
Aunque no os preocupéis, la noche del 24 los niños asutríacos también reciben regalos: se los trae el Christkind, el niño Cristo. Una especie de bebé con el pelo rubio y con alas que va de casa en casa repartiendo regalos. (Qué raros son los austríacos).